Lo que podría parecer un smartphone Android normal por fuera, por dentro es una herramienta de vigilancia sin comparación. El youtuber Arun Maini (MrWhosetheboss en YouTube) ha logrado analizar un Samtaesung 8, un dispositivo de gama alta norcoreano. Todo lo que encontró confirma las peores sospechas sobre el control digital del régimen.
No se trata solo de censura pasiva; el teléfono está diseñado para vigilar activamente a su dueño, convirtiendo el dispositivo más personal en un delator de bolsillo. Veamos qué esconde.
El espía en segundo plano. Una de las características más inquietantes descubiertas es un software de sistema que actúa como un "Gran Hermano" automatizado. El móvil realiza capturas de pantalla aleatorias y silenciosas cada vez que el usuario abre una app o hace otras tareas.
Estas imágenes no se pueden borrar y se almacenan en una carpeta oculta del sistema operativo: crea un registro visual perpetuo de la actividad del usuario. Esto es una prueba más de algo que ya se conocía, y es que los intervalos de capturas automáticas son tan frecuentes como cada cinco segundos. La censura llega hasta los juegos: un clon del título de simulación de fútbol de Konami borra a jugadores surcoreanos exitosos: por ejemplo, Son Heung-min, el jugador del Tottenham, no aparece.
Una firma digital que impide compartir. Curioso es que el sistema de archivos Android ha sido modificado para rechazar cualquier contenido externo: si se intenta cargar una película, una canción o un texto que no haya sido generado por el Estado, el teléfono lo borra automáticamente.
¿Cómo se realiza esta acción? Con un sistema de firmas digitales: cada archivo lleva una "marca" del gobierno. Si un usuario crea un archivo, el móvil le pone su propia firma única. Esto implica que si esa foto está en el móvil de otra persona, las autoridades pueden rastrear quién la originó y quién la compartió. Desde luego, anula todo rastro de disidencia anónima.
El nombre de Kim Jong-un se pone automáticamente en negrita en señal de respeto
Y un teclado que corrige tu ideología. El control llega hasta límites insospechados: el análisis del creador de contenido muestra que el teclado no permite escribir referencias a Corea del Sur. En caso de intentarse, el sistema aplica un autocorrector forzoso que cambia la palabra por "Estado títere". Es un paso más allá de la censura de palabras prohibidas, cambiándolas para alinearlas con la propaganda estatal.
Cascarón vacío. A pesar de correr sobre una versión de Android relativamente moderna (Android 10 u 11), el dispositivo es inútil para el mundo exterior. No hay Wi-Fi real, solo acceso a la intranet nacional. Las apps como el navegador o el clima están desconectadas de internet y solo muestran información aprobada. Quizá por ese motivo, quienes tienen acceso a tecnología libre en el país norcoreano, eligen un iPhone.
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Así es un móvil Android en Corea del Norte: hace fotos aleatorias para espiar y marca cada archivo que abre
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Xataka Móvil
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Pepu Ricca
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