Las autoridades sanitarias de Bolivia declararon este martes alerta naranja en el departamento de Santa Cruz, luego de la detección de un caso sospechoso de influenza A H3N2 en una mujer de 26 años que falleció tras presentar síntomas compatibles con la enfermedad y que había llegado recientemente al país procedente de Japón.
El director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Santa Cruz, Julio César Koca, informó en conferencia de prensa que, si bien existe la sospecha clínica, el caso aún no ha sido confirmado por laboratorio. “Tenemos un caso sospechoso de la gripe A (H3N2) de la variante K, todavía no está confirmado”, precisó la autoridad.
La declaración de alerta naranja se produce en un escenario regional de mayor vigilancia epidemiológica. Dos días antes, el Ministerio de Salud de Perú activó una alerta sanitaria a nivel nacional ante el posible ingreso de enfermedades como la influenza A H3N2, subtipo K, en ese país fronterizo con Bolivia.
A nivel internacional, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió el pasado 12 de diciembre sobre el aumento de la circulación de este virus en diversas regiones del mundo. En su comunicado, el organismo reiteró el llamado a reforzar la vigilancia epidemiológica y a promover la vacunación como principal medida preventiva.
Según la OPS, el subtipo K de la influenza A H3N2 ha registrado un crecimiento acelerado en Europa y en varios países de Asia, donde ya representa una proporción significativa de los virus analizados. En América del Norte, tanto Estados Unidos como Canadá también reportan un incremento progresivo en las detecciones de este subclado.
No obstante, el organismo sanitario regional subrayó que, hasta ahora, no se ha observado una circulación similar del subtipo K en América del Sur, aunque recomendó mantener un monitoreo estrecho ante la evolución del escenario epidemiológico global.