CDMX se desnuda: marcha nudista toma las calles para romper tabúes | Video

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Desde el Senado hasta la colonia San Rafael, colectivos nudistas se manifestaron para exigir espacios seguros y romper el estigma sobre la desnudez

Este viernes 31 de mayo, la Ciudad de México fue escenario de una manifestación poco convencional, pero profundamente simbólica: la Marcha Nudista 2025. Desde el Senado de la República hasta el Jardín del Arte en la colonia San Rafael, personas de distintas edades, géneros y corporalidades caminaron completamente desnudas para visibilizar un estilo de vida aún estigmatizado en la sociedad mexicana.

Senos, penes, glúteos y hasta algunas erecciones fueron visibles durante el recorrido que no solo retó la moral tradicional, sino que también promovió una cultura de aceptación corporal y respeto mutuo. Entre consignas como “¡Esos mirones, también que se encueren!”, los participantes invitaron a los observadores a dejar atrás la ropa, el juicio y el tabú.

La marcha fue organizada por integrantes de al menos ocho colectivos nudistas, quienes buscan normalizar la vida al desnudo y exigir espacios seguros donde puedan convivir en libertad. Blanca, fundadora del colectivo Nudtopía, señaló en entrevista al medio El Universal que el nudismo es una forma de vida que está creciendo en la capital: “Somos una tribu urbana poco conocida. Esta es nuestra manera de decir que existimos, que también consumimos, que también queremos lugares donde estar sin ropa”.

Blanca recalcó que el nudismo no debe confundirse con sexualidad o exhibicionismo. “Somos personas normales que disfrutan actividades cotidianas —caminar, hacer yoga, tomar el sol— sin ropa. No se trata de morbo, se trata de libertad y de aceptación”.

Por su parte, Héctor Martínez, uno de los promotores más reconocidos del nudismo en México y organizador principal del evento, estimó que cerca de mil personas participaron en esta edición. Explicó que no existen cifras oficiales sobre cuántos nudistas hay en el país, pero aseguró que el movimiento gana fuerza cada año.

“La marcha es una forma de desafiar la vergüenza impuesta sobre nuestros cuerpos. El cuerpo no es igual a pecado, ni a provocación. Todos los cuerpos son válidos, sin importar su forma, tamaño o edad. Rechazamos los estándares de belleza impuestos”, declaró Martínez.

El “Día al Desnudo”, como lo nombran los organizadores, también funcionó como espacio libre de acoso, con actividades organizadas como sesiones de yoga, caminatas grupales, meditación y simplemente, descanso bajo el sol.