China anunció que a partir de 2026 reducirá los aranceles a la importación de una serie de productos sanitarios e industriales, en una estrategia destinada a impulsar la innovación, reforzar su capacidad productiva y optimizar el acceso a insumos estratégicos.
De acuerdo con el documento oficial, las rebajas afectarán a productos vinculados al sector salud, entre ellos sangre artificial y kits de diagnóstico para determinadas enfermedades, así como a componentes hidráulicos y correas de transmisión. También se beneficiarán materiales industriales relevantes como el polvo negro reciclado utilizado en baterías de litio, clave para la industria energética y el sector tecnológico.
El plan contempla, además, la eliminación de ciertos aranceles actualmente vigentes para micromotores, máquinas de impresión y ácido sulfúrico, que pasarán a regirse bajo los gravámenes correspondientes al estatus de “nación más favorecida” (MFN).
Las autoridades chinas subrayaron que el objetivo de estas modificaciones es mejorar la articulación entre los mercados internos y externos, fortalecer las cadenas de suministro y asegurar mayor disponibilidad de materias primas y productos médicos esenciales. En total, se estima que 935 materias primas quedarán por debajo de los niveles arancelarios MFN, lo que supone un ajuste relevante para los sectores sanitario, industrial y tecnológico de cara al próximo año.