Si sigues habitualmente la actualidad de Samsung en redes como X, seguro que has visto en alguna ocasión esos vídeos que "miden" la fluidez de las diferentes versiones de One UI abriendo y cerrando apps a velocidades de vértigo. Con este tipo de pruebas, se ve claramente cómo funcionan las animaciones y transiciones del sistema y si estás se ralentizan o renquean en algún momento.
Por lo general, no solemos usar nuestros Galaxy de esa manera, así que es difícil forzar tanto la máquina como para llegar a verle las costuras. Además, Samsung suele optimizar bastante bien estos aspectos, aunque en algunas versiones podrían ir mejor. Lo bueno es que hay una forma fácil de conseguir más suavidad con un simple ajuste.
Este ajuste te va a dar una alegría
Solemos prestar atención a ajustes como el la fluidez de movimientos, pero a veces no nos fijamos en cosas mucho más evidentes. Para conseguir esa mayor suavidad, el truco es tan simple como rebajar la resolución de la pantalla si la tenemos en QHD+ y pasar a Full HD+.
Para ello sólo hace falta ir a Ajustes, allí a Pantalla, y luego a Resolución de pantalla. En este apartado, según el modelo, encontraremos dos o tres opciones: HD+, FHD+ y QHD+ para los modelos que soportan esta última, y sólo las dos primeras en los modelos que no llegan al QHD+.
Aquí sólo se trata de fijarnos si nuestro Galaxy está configurado en QHD+ y bajar FHD+ y luego, aplicar los cambios.
El por qué es tan simple como que la resolución QHD+ (2K para los amigos), con efectos y prestaciones como las animaciones, las altas tasas de refresco o las tareas de IA en segundo plano entre otras, exige mucho más a la GPU o al controlador de la pantalla. Cuando reducimos la resolución a FHD+, estamos reduciendo también la carga de trabajo sobre ellos.
Tanto como un 40%, y claro, al reducir la resolución, estaremos obteniendo un beneficio instantáneo, con lo que disfrutaremos de transiciones, animaciones o una respuesta táctil mucho más estable y consistente.
Lo que a nosotros nos parece una mayor suavidad o menos ralentización es simplemente que no estamos llevando a la GPU al límite. No sólo eso, ajustar la resolución en ese punto dulce que es el Full HD+ es también reducir el consumo de energía, por lo que nuestra batería puede estirar un poco más y darnos ese tiempo de uso que a veces nos impide llegar al final del día.
Samsung optimiza sus sistemas para funcionar mejor en FHD+, así que, si elegimos esta resolución, estaremos asegurándonos un mejor rendimiento gráfico de nuestro Galaxy. Y como ves, es cuestión de apenas tres toques en pantalla.
Imágen | Manu García
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La noticia
Con un simple ajuste he conseguido que mi Galaxy vaya mucho más suave y fluido. Sólo me ha costado cuatro toques en la pantalla
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Xataka Móvil
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Manu García (Visnuh)
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