La Fiscalía de Bolivia solicitó este jueves la prisión preventiva por un periodo de tres meses para el expresidente Luis Arce, actualmente detenido, en el marco de una investigación por el presunto desvío de capitales del Fondo Indígena durante su gestión como ministro de Economía.

El Ministerio Público pidió que Arce sea enviado al penal de Qalahuma, en la ciudad de Viacha, departamento de La Paz, argumentando riesgo de fuga y posible obstrucción a la investigación, además de la existencia de indicios suficientes que motivaron su arresto.

Según el escrito de imputación, al que tuvo acceso el diario boliviano El Deber, el exmandatario —militante del Movimiento al Socialismo (MAS)— “sugirió, promovió y autorizó la canalización irregular de fondos públicos hacia cuentas particulares”. Durante su primera comparecencia ante las autoridades, Arce se acogió a su derecho a guardar silencio.

La Fiscalía anunció además que citará a declarar a un total de 24 personas en el marco de esta causa, que investiga el presunto uso indebido de recursos destinados a proyectos para comunidades indígenas.

El caso ha generado una fuerte repercusión política en Bolivia, donde sectores del oficialismo y de la oposición siguen de cerca la evolución del proceso judicial contra quien fuera una de las figuras clave del área económica en los anteriores gobiernos del MAS.