El Ciudadano
La candidata presidencial de Unidad por Chile, Jeannette Jara, corrigió sus dichos sobre el controvertido megaproyecto INNA, una iniciativa de hidrógeno verde impulsada por AES Andes en Antofagasta, y aseguró que su evaluación deberá garantizar “una distancia adecuada de los observatorios astronómicos”.
Esto tras recibir críticas desde el mundo científico, específicamente de la astrónoma Tere Paneque, integrante de su propio comando de sociedad civil.
El megaproyecto energético INNA de la empresa estadounidens, busca instalar una planta productora de hidrógeno líquido y amoníaco verde de más de 3.000 hectáreas a pocos kilómetros del Observatorio Paranal de ESO, en el desierto del Atacama, cuyas actividades científicas dependen de la calidad del cielo nocturno.
En este observatorio operan algunos de los telescopios más avanzados como el Very Large Telescope (VLT) y está previsto que albergue el Extremely Large Telescope (ELT), el telescopio óptico e infrarrojo más grande del mundo, que actualmente en fase de construcción.
Según el último análisis de ESO, el complejo industrial de AES Andes provocaría una contaminación lumínica de más del 200% en el proyecto de telescopio CTAO y de más del 170% en el Paranal, afectando la observación astronómica de esa zona del país, consideradas de las mejores del mundo.
Críticas de Paneque y Maza
Durante el último debate presidencial de Anatel, Jeannette Jara señaló que en caso de llegar a La Moneda seguiría adelante con el proyecto de hidrógeno verde, pese a su cercanía con el Observatorio Paranal, argumentando que está «pensando en el empleo y también en las posibilidades que se abren para Chile los próximos años».
Por su parte la carta presidencial del Partido Republicano, José Antonio Kast señaló que «si queremos ver el tema de empleo, avancemos en Dominga, avancemos en proyectos mineros, en lugares donde no contaminen el cielo chileno (…) estos cielos son únicos, únicos a nivel mundial. Me van a decir que porque quieren instalar una planta de hidrógeno verde, que la podrían instalar en el sur».
Tere Paneque, a través de una historia de Instagram, expresó su descontento con ambas posturas. «Frente a la insistencia de ustedes, déjenme decirles que ninguna de las dos respuestas me gustó», comenzó señalando la astrónoma.
«Todos saben la batalla que hemos dado aquí y desde distintas instituciones astronómicas para que el proyecto se cambie de ubicación. Efectivamente es un tema complejo para una sociedad con distintas prioridades, por eso es injusto que debamos escoger entre lo uno o lo otro», indicó.
La también escritora planteó que mover INNA «no es solo por la astronomía y la ‘fama’, es por su impacto a un ecosistema más amplio, especies protegidas, impacto a las comunidades locales».
«Si queremos avanzar debemos considerar todo, no solo el cielo, no solo los trabajos (que los observatorios también traen)», cuestionó
Paneque fue más allá, cuestionando el enfoque del debate y la responsabilidad de la ciencia en la esfera pública.
«Queda claro que desde la ciencia debemos seguir alzando la voz en temas políticos y que tratar de empujar a los candidatos a una elección dicotómica no es lo correcto. Frente a las elecciones, mi decisión sigue siendo la misma. La única razón por la que esto es noticia es porque todos sabemos la realidad de cuál es la visión científica y ambientalista de cada candidatura, no nos engañemos», indicó.
Finalmente, expresó su deseo de que “todo este entusiasmo e interés se mantenga, el proyecto INNA sigue en evaluación ambiental y debemos seguir hablando de ello para proteger nuestros laboratorios naturales”.
Por su parte, el astrónomo José Maza, señaló que Chile debe avanzar con urgencia en el hidrógeno verde, pero afirmó que el proyecto debería instalarse “50 kilómetros más al sur, al sur de Taltal”, para evitar afectaciones a la observación astronómica.
“Esto es como querer poner una discoteca contigua a la catedral. La discoteca se puede mover a otro sitio… la catedral llegó primero”, dijo en entrevista con Emol.
Jara corrige dichos sobre INNA
Tras estas declaraciones la candidata del progresismo, Jeannette Jara utilizó la red social X (antes Twitter) para publicar una aclaración sobre su postura y señaló que “proteger nuestros cielos es cuidar un tesoro natural, científico y cultural que nos pertenece a todas y todos”.
Planteó que la decisión sobre el proyecto deberá basarse en “evaluaciones técnicas estrictas” que aseguren una distancia suficiente de los observatorios, resguardando su funcionamiento y el prestigio de Chile como referente mundial en astronomía.
Finalmente, la presidenciable cerró su argumento buscando un equilibrio entre el desarrollo económico y la preservación del patrimonio nacional.
«Podemos avanzar en desarrollo y empleo, sí, pero sin poner en riesgo lo que nos hace únicos: nuestros cielos limpios, nuestras científicas y científicos, y el vínculo profundo de las comunidades con su territorio», aseveró.
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