La última comunicación de China Vanke a la Bolsa de Compensación de Shanghái señala la decisión de la promotora de celebrar un segundo encuentro con sus acreedores durante la mañana del jueves, con el objetivo de renegociar las condiciones de un bono que ha generado fricciones entre las partes involucradas, según reportó EFECOM. Este anuncio se produce en un contexto de máxima tensión, ya que el plazo de cinco días otorgado como prórroga para evitar el incumplimiento del pago de un bono de alrededor de 283 millones de dólares (unos 258 millones de euros) comenzó a correr tras el rechazo mayoritario de los tenedores a las sucesivas propuestas planteadas por la inmobiliaria, informó también EFECOM.
De acuerdo con la información difundida por EFECOM, la promotora con sede en Shanghái no logró el respaldo del 90% de los acreedores exigido para la aprobación del plan de extensión del vencimiento inicial, a pesar de haber presentado tres versiones con mejoras en las condiciones. Entre los principales opositores figuran grandes entidades bancarias, que consideraron poco satisfactorias las condiciones en comparación con acuerdos similares alcanzados por otras compañías en dificultades del sector inmobiliario. Vanke, que anteriormente ocupó el primer lugar entre las promotoras chinas, se comprometió a continuar las negociaciones para alcanzar una solución que logre evitar el primer impago de su historia, tal como precisa el texto de EFECOM.
La propuesta original de la inmobiliaria consistía en postergar un año el vencimiento del bono, estrategia que no resultó suficiente para persuadir a los acreedores. Además de los esfuerzos centrados en este instrumento, China Vanke programó para el 22 de diciembre una nueva reunión con acreedores, en este caso relacionada con otro título cotizado en el mercado continental chino por un valor aproximado de 524 millones de dólares (unos 478 millones de euros) y cuyo vencimiento está previsto para el 28 de diciembre, según añadió EFECOM. La promotora enfrenta vencimientos de bonos que totalizan cerca de 1.900 millones de dólares (unos 1.734 millones de euros) hasta mediados de 2026, tal como se desprende de los datos recogidos por EFECOM.
La situación de Vanke reviste especial atención en el sector inmobiliario chino, destacó EFECOM, pues después de la caída de gigantes privados como Evergrande y Country Garden —ambos en dificultades por el exceso de deuda—, esta promotora estatal era una de las pocas que mantenía hasta hace poco una calificación crediticia favorable. Esto cambió en marzo del año pasado, cuando las principales agencias de rating degradaron la calificación de Vanke a la categoría de ‘bono basura’, con sucesivas revisiones a la baja durante 2024.
La supervivencia financiera de la empresa se ha sustentado recientemente en préstamos otorgados por su principal accionista, Shenzhen Metro, por valor de 4.200 millones de dólares (unos 3.835 millones de euros). No obstante, la continuidad de este apoyo presenta incertidumbre desde la renuncia, el mes pasado, del presidente de Vanke, Xin Jie, mientras las autoridades chinas muestran una postura más restrictiva respecto a nuevas líneas de crédito a la promotora. Esta circunstancia ha despertado dudas entre los inversores sobre la capacidad de la empresa para mantener los pagos sin incurrir en impagos, según consignó EFECOM.
El posible incumplimiento de Vanke genera inquietud no solo por su impacto directo, sino también por el riesgo de que otras inmobiliarias chinas, que hasta el momento habían sorteado la suspensión de pagos, puedan verse arrastradas hacia situaciones semejantes. EFECOM recuerda que el deterioro financiero del sector se agravó a partir de agosto de 2020, cuando las autoridades de Pekín impusieron restricciones al acceso a la financiación para promotoras con altos niveles de endeudamiento, escenario que supuso el inicio de una serie de crisis que afectó fuertemente a empresas como Evergrande, la cual acumulaba pasivos cercanos a los 330.000 millones de dólares (alrededor de 301.430 millones de euros).
En respuesta a las dificultades que enfrentan las promotoras, el gobierno chino ha implementado diversas medidas de apoyo. Entre estas destacan la apertura de líneas crediticias por parte de bancos estatales, que han focalizado la asignación de recursos en la finalización de proyectos de viviendas adquiridas sobre plano. Según la información reunida por EFECOM, esta medida busca evitar problemas sociales asociados a retrasos o cancelaciones de entregas de propiedades, dada la relevancia de la vivienda como instrumento de inversión para la población china.
A pesar de estas acciones oficiales, el comportamiento del mercado inmobiliario señala una tendencia a la baja. Conforme a los datos difundidos por EFECOM, las ventas comerciales calculadas por área construida experimentaron una caída del 24,3% en 2022, una disminución adicional del 8,5% en 2023 y una reducción del 12,9% en 2024. Esta secuencia pone de relieve la persistencia de los problemas estructurales en el sector, así como la dificultad de reactivar la demanda en un escenario de restricción crediticia y desconfianza por parte de los inversores.
El desarrollo de los próximos días será clave en la búsqueda de una salida negociada que permita a China Vanke evitar el impago y contribuir a estabilizar un sector que arrastra dificultades desde hace varios años, según se desprende de la información aportada por EFECOM. La expectativa en torno a las reuniones anunciadas y la reacción de los mercados sigue marcada por la cautela y la atención a las decisiones de las autoridades, los acreedores y la propia compañía.
completa toda los campos para contáctarnos