Llevo enviando las series de Netflix desde el móvil a la tele desde que tuve el primer Google Chromecast, allá por 2013. Ver contenido en pantalla grande era tan sencillo como elegir el icono de «casteo» en la app de Netflix, seleccionar el Chromecast y aceptar. Ahora todo está cambiando.
La decisión. Netflix no ha eliminado el botón del Chromecast en su app, el problema es que ahora no aparecen dispositivos conectados al apretarlo. Al menos mientras no tengas un Chromecast muy antiguo y, además, dispongas de una suscripción sin anuncios.
Ni mi reproductor Android TV ni mi Smart TV aparecen ya en el envío desde el móvil
Como queda detallado en su página de ayuda, Netflix decidió restringir el envío desde el móvil a la tele. Según explica la empresa:
Netflix ya no admite la transmisión de programas desde un dispositivo móvil a la mayoría de televisores y dispositivos de streaming para TV. Tendrás que usar el mando a distancia físico del televisor o dispositivo de streaming para TV para navegar por Netflix.
La decisión busca, en principio, mejorar la experiencia de Netflix en aquellos dispositivos del hogar que cuenten con un mando a distancia y su propia app de Netflix. Por tanto, si tienes un Android TV, Google TV o televisión que admita el protocolo Google Cast, te quedas sin el envío del contenido a la pantalla grande.
Solo para casos puntuales. Como suele ocurrir, no hay regla sin excepciones. En este caso, Netflix establece los siguientes supuestos para tener el acceso al envío:
Además, el «casteo» queda al alcance solo de aquellos usuarios que tengan una suscripción completa. Si cuentas con un plan con anuncios no puedes utilizar el móvil para enviar las series y películas a la televisión.
Menos opciones y planes cada vez más caros. Desde aquellos días en los que usaba mi Netflix estadounidense en ese primer Chromecast he visto cómo la plataforma intentaba rentabilizar al máximo sus clientes. Las suscripciones se han casi triplicado, compartir una cuenta familiar sin abonar un extra es casi imposible, Netflix ha troceado las opciones para dejar las mejores en los planes más caros y ahora da el sablazo definitivo: acabar con una función básica.
Hay multitud de razones por las que merece la pena enviar el contenido desde el móvil. Porque es más cómodo, porque no siempre encuentras el mando a distancia y porque, a menudo, la app del reproductor es mucho más lenta que la del móvil. Que Netflix elimine la opción es un golpe bajo. Que encima restrinja las excepciones a los planes caros solo evidencia el deseo de exprimir a sus usuarios.
El plan con anuncios es rentable. Pero si pagamos más, mejor. Esto es justo lo que debe pensar Netflix para recortar en capacidades que ya eran un estándar. La plataforma encontró un filón en los planes con anuncios: son la puerta de entrada a la fidelidad y a que terminemos pagando más para evitar restricciones. Punto para Netflix.
La escalada de precios no va a detenerse, la segmentación de opciones en los planes tampoco. Nos toca ir pagando más mientras obtenemos menos a cambio.
Imagen de portada | Iván Linares
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La noticia
Netflix quiere convertir lo básico en un lujo: cargarse el envío al Chromecast es un nuevo paso a que paguemos más por lo mismo
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Iván Linares
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