RLA construirá complejo de viviendas Luis Castañeda Lossio sobre dos parques zonales de Lima Norte: ‘megamanzanas’ recibirán a más de 20.000 personas

RLA construirá complejo de viviendas Luis Castañeda Lossio sobre dos parques zonales de Lima Norte: ‘megamanzanas’ recibirán a más de 20.000 personas

Exclusivo. China podría ser responsable de la construcción de las nuevas macromanzanas de Ancón, según el Concejo Metropolitano de Lima. Decisión conjunta con los ministerios de Vivienda y del Ambiente plantea dudas sobre las políticas de desarrollo urbano de la MML

El Concejo Metropolitano de Lima ha aprobado el Plan Específico Ciudad Bicentenario “Luis Castañeda Lossio”, un proyecto que se enmarca en el megaproyecto “Ciudad Bicentenario” y que busca transformar, asegura el cabildo, más de 8.000 hectáreas del distrito de Ancón en una ciudad sostenible, verde y segura. Según informó la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML), esta iniciativa, que se desarrollará en tres fases, tiene como objetivo albergar a medio millón de habitantes para el año 2044, con una primera etapa que se extenderá entre 2024 y 2026 y que incluirá la construcción de 5.000 viviendas para más de 20.000 personas.

De acuerdo con la información proporcionada por la MML, el proyecto se enmarca dentro del Corredor Logístico del Pacífico, que incluye infraestructuras clave como el megapuerto de Chancay, el futuro Parque Industrial de Ancón, el nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez y el puerto del Callao. Este megaproyecto, considerado por la MML como “el más avanzado en la historia del urbanismo peruano”, está dirigido principalmente a personas de menores recursos y busca fomentar el desarrollo económico y social en la región.

MML: Lima aprueba la creación de la Ciudad Bicentenario “Luis Castañeda Lossio”

El desarrollo de la Ciudad Bicentenario estará a cargo de la Empresa Municipal Inmobiliaria de Lima (EMILIMA), el primer operador público del suelo en el Perú. Según detalló el arquitecto Guillermo Malca, presidente del Instituto Metropolitano de Planificación (IMP), la primera fase del proyecto abarcará 50 hectáreas y se centrará en la planificación y zonificación de los terrenos. Posteriormente, se procederá con la habilitación urbana y, finalmente, con la construcción de viviendas y equipamiento urbano, que incluirá servicios básicos como agua, desagüe, electricidad, vialidad, centros de salud y colegios.

El diseño urbano contempla conjuntos multifamiliares de 5 pisos para densidad media y edificios de 12 o más pisos para densidad alta, además de espacios públicos, áreas comerciales y siete macromanzanas -también conocidas como ‘megamanzanas’ en el mercado-. También se proyecta la construcción de una importante vía arterial, la alameda Qhapac Ñam, y la posible implementación de un tren de cercanías para mejorar la conectividad.

El proyecto fue presentado en sesión de concejo por la regidora Roxana Rocha, mientras que la sustentación técnica estuvo a cargo del arquitecto Malca. Durante la misma sesión, se destacó que la Ciudad Bicentenario “no solo busca atender la demanda de vivienda social, sino también convertirse en un modelo de urbanismo sostenible en el país”.

Rafael López Aliaga: Lima buscará inversión china para la Ciudad Bicentenario

En paralelo a la aprobación del plan en Lima, Luis Molina Arles, presidente del Instituto de la Ciudad de Lima (ICL), presentó el proyecto en Shanghái ante un grupo de empresarios chinos, invitándolos a invertir en esta iniciativa. Según la MML, esta exposición forma parte de sus esfuerzos por atraer inversión extranjera para garantizar el éxito del megaproyecto. Hace casi un año, en el mensaje a la Nación de 28 de julio de 2024, la presidenta Dina Boluarte adelantó la posibilidad de fomentar los proyectos Gobierno a gobierno (G2G) con el régimen.

El concepto de la Ciudad Bicentenario no es nuevo. De acuerdo al Ministerio del Ambiente (MINAM) y el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), la idea surgió en 2020 como parte del Parque Ecológico Nacional Antonio Raimondi, un proyecto más amplio que buscaba convertir más de 8.100 hectáreas en una ciudad verde y sostenible. La propuesta fue formalizada mediante el Decreto Supremo n.° 009-2020, aprobado el 11 de septiembre de ese año.

Ancón perderá áreas verdes para la Ciudad Bicentenario

Pero no se debe perder el foco. Este proyecto promovido por la Municipalidad de Lima, busca construir viviendas en terrenos que estaban reservados para áreas verdes, lo que plantea interrogantes sobre la calidad de vida de los futuros residentes y la sostenibilidad de la ciudad. En efecto, la Ciudad Bicentenario promovida por el MINAM contempla un total de 281 hectáreas asignadas al Ministerio de Vivienda para el desarrollo de viviendas y usos complementarios. Esta superficie es comparable al tamaño del distrito de Lince (303 hectáreas), mientras que la ciudad “Luis Castañeda Lossio” ocupa un área de más de 150 hectáreas que había sido reservada para parques zonales.

Vale recordar que, actualmente, Lima enfrenta un déficit crítico de áreas verdes. La capital peruana cuenta con apenas 2,3 metros cuadrados de áreas verdes por habitante, muy por debajo de los estándares internacionales recomendados.

El arquitecto urbanista Aldo Facho Dede expresó su preocupación por el impacto de esta decisión, señalando que los parques zonales originalmente previstos no solo beneficiarían a los futuros residentes de la Ciudad Bicentenario, sino también a las familias de distritos cercanos como Ancón, Santa Rosa y Chancay. Estas áreas verdes habrían servido para equilibrar la construcción de edificios con espacios recreativos y grandes espacios arbolados, esenciales para mejorar la calidad de vida en una ciudad densamente poblada.

Lima enfrenta retos hídricos en el proyecto Ciudad Bicentenario

Otro desafío no menor que enfrenta el proyecto es el abastecimiento de agua potable y la solución del saneamiento. Ancón es un distrito con una disponibilidad de agua extremadamente limitada, lo que ya ha obstaculizado proyectos anteriores, como el caso de Ciudad La Alameda de Ancón, promovido durante el gobierno de Ollanta Humala. Resolver este problema requerirá inversiones millonarias, ya que la infraestructura necesaria para llevar agua a esta zona es costosa y compleja. Facho Dede destacó que, aunque el desagüe puede ser solucionado, el suministro de agua potable representa el mayor desafío para el desarrollo de estas viviendas.

Sobre el concepto de megamanzana comentó “los proyectos promovidos por la Corporación de la Vivienda entre los años 40 y 80 tenían ese concepto, empezando por la Unidad Vecinal N° 3, que se ubica frente al campus de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), las unidades vecinales de Matute y Mirones, el Residencial San Felipe y hasta incluso Limatambo. Estos proyectos fueron pensados como conjuntos residenciales con importantes áreas peatonales, parques y bolsones de estacionamiento.”

Megamanzanas sobre 4.360 hectáreas verdes

El modelo de desarrollo propuesto para la Ciudad Bicentenario parece inspirarse en proyectos residenciales históricos como la Residencial San Felipe, que se caracterizan por grandes manzanas residenciales con áreas verdes y un enfoque peatonal. Esto buscaría corregir situaciones como la del aeródromo de Collique en Comas, donde se perdió la oportunidad de crear grandes parques públicos. En lugar de ello, se construyeron pequeños parques privados dentro de los condominios, lo que limitó el acceso a espacios recreativos para la comunidad en general. lo que limitó el acceso a espacios recreativos para la comunidad en general.

En cuanto a la ejecución del proyecto, se barajan dos posibles vías: podría ser gestionado directamente por la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) o a través de ProInversión, una entidad del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) encargada de promover la inversión privada. El Estado peruano no vendería directamente las viviendas, sino que licitaría los terrenos para que empresas privadas desarrollen y comercialicen los inmuebles, un modelo similar al utilizado en el proyecto de Collique.

¿Déficit de vivienda en Lima?

El déficit habitacional en Lima es el tema central en este debate. Aunque existe un alto déficit de viviendas, Facho Dede explicó el principal problema es que los ingresos de más del 60% de los limeños son de origen informal. Por esa razón las familias no califican para créditos hipotecarios y, por lo tanto, no pueden acceder a los beneficios e incentivos del Fondo Mivivienda. Esto plantea dudas sobre si los futuros desarrollos en la Ciudad Bicentenario podrán atender las necesidades de los grupos más vulnerables.

“La ventaja es que la incidencia del costo del suelo en el proyecto va a ser sustancialmente menor que en otras partes de Lima, con lo cual el precio de la vivienda debería ser más bajo. Pero traer agua para todas esas familias será lo más complejo, y por ende costoso. Por eso es que, en parte, toda esa zona sigue siendo un arenal”, indicó para Infobae Perú.

Ciudad Luis Castañeda Lossio: controversia por áreas verdes en la Ciudad Bicentenario

La comparación con otras ciudades de la región pone en evidencia la brecha que enfrenta Lima en términos de áreas verdes. Facho Dede señaló que ciudades como Buenos Aires, Bogotá y Quito superan los seis metros cuadrados de área verde pública por habitante y cuentan con parques de gran escala, algunos de ellos con superficies que alcanzan las 500 hectáreas. En contraste, Lima tiene solo un 11% de parques que superan las cinco hectáreas, y su parque metropolitano más grande, el Campo de Marte, abarca apenas 13,4 hectáreas. Además, la mayoría de los grandes parques de la ciudad fueron planificados antes de 1970, lo que evidencia una falta de inversión en infraestructura verde en las últimas décadas.

El crecimiento urbano desordenado también ha contribuido a la crisis de áreas verdes en Lima. Según datos del Grupo de Análisis para el Desarrollo (GRADE), el 91% del nuevo suelo urbano en la ciudad se ha generado a través de ocupaciones informales e ilegales de terrenos rurales y eriazos. Este tipo de expansión no solo carece de servicios, sino que también omite la reserva de suelo para parques, avenidas, colegios y hospitales. Como resultado, los nuevos barrios enfrentan limitaciones en la recaudación de impuestos municipales, lo que dificulta la implementación y el mantenimiento de espacios públicos.

Lima y una brecha interminable de áreas verdes: ¿Más cemento?

Según el urbanista, para cerrar la brecha de áreas verdes, Lima necesitaría sumar aproximadamente 3.800 hectáreas, una superficie equivalente a los distritos de Santiago de Surco y Surquillo combinados. El Plan de Desarrollo Metropolitano de Lima al 2040 (Planmet 2040) identifica que solo el 6,6% del suelo urbanizable de la ciudad permanece sin ocupar, principalmente en las zonas norte y sur. En este contexto, el MINAM había propuesto la creación de la Franja Verde de la Ciudad Bicentenario, un proyecto que busca forestar 2.000 hectáreas con más de 1,3 millones de árboles en Ancón. Este esfuerzo debía representar una oportunidad para mitigar el déficit de áreas verdes y mejorar la calidad de vida en la capital.

La importancia de las áreas verdes trasciende el ámbito urbano. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), existe una relación directa entre la salud y el acceso a espacios verdes. Un informe de 2016 detalla beneficios como la reducción de enfermedades cardiovasculares, respiratorias, obesidad y diabetes, así como mejoras en la salud mental y la disminución del estrés. En este sentido, la planificación de proyectos como la Ciudad Bicentenario debería considerar no solo la necesidad de viviendas, sino también el impacto en la salud y el bienestar de sus habitantes, asevera el experto.