A 18 años del día triste de una era gloriosa: el lado B de la caída de Colo Colo ante Pachuca en la Sudamericana 2006
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A 18 años del día triste de una era gloriosa: el lado B de la caída de Colo Colo ante Pachuca en la Sudamericana 2006
Entre 2006 y 2007, Colo Colo vivió algunos de los días más gloriosos de su exitosa historia. A nivel local, el equipo dirigido por Claudio Borghi se quedó con el tetracampeonato de Primera División. Además, sumaron una gran campaña de la Copa Sudamericana de 2006. Hasta la mañana del 13 de diciembre, era casi unánime la creencia de que el Cacique se quedaría con el certamen subcontinental. Llegaron a la final tras dejar en el camino a Huachipato, Coronel Bolognesi, Alajuelense, Gimnasia y Esgrima y Toluca. En la definición enfrentaban a Pachuca. Y a la revancha llegaban tras haber igualado 1-1 en México. La cita era en el Estadio Nacional, a las 21.30 horas.
El paso de la alegría a la desazón para los albos fue veloz. Humberto Suazo abrió la cuenta a los 35 minutos. En el complemento se notó el cansancio en los de Macul. Gabriel Caballero (53′) y Christian Giménez (73′) consumaron la remontada. La imagen del llanto de Matías Fernández, que había sido la gran figura del certamen, copó las portadas al día siguiente.
“Nos daban por perdidos porque habíamos empatado en México, pero queríamos hacer historia. Ya en el partido íbamos perdiendo, pero estábamos mejor nosotros. Remontamos merecidamente el partido porque habíamos dominado en casi todos los sectores. Por momentos los jugadores de Colo Colo no pasaban la mitad de la cancha y no tocaban la pelota. Al final nos quedamos con el título en un estadio pletórico, que estaba lleno contra solo nosotros en la cancha y nuestros compañeros afuera”, recordó años más tarde Caballero, en diálogo con el medio AS.
“En la carrera del jugador hay momentos que son imborrables, que quedan para toda la vida. Ese, claramente, es uno de los más importantes. Fuimos el único equipo mexicano que ha logrado ganar un torneo de Conmebol, y lo conseguimos de visitante, contra jugadores de Colo Colo que en ese momento estaban marcando una época en Sudamérica y que luego, se asentaron en Europa. Teníamos un equipo con mucha personalidad y juego”, complementaba.
“Recuerdo el entorno, por lejos. Cuando íbamos perdiendo y ver que alentaban muchísimo, cantaban con todo. Salimos a la cancha y era un marco imponente. A partir del 1-1 el estadio se quedó callado y con el segundo mucho más. Uno veía las caras de los jugadores de Colo Colo y también estaban callados. Miraba a la gente y nadie lo podía creer”, sentenciaba.
¿Qué pasó en Colo Colo?
Para el Cacique, fueron varios los factores que afectaron en aquel encuentro. A Borghi se le apuntó por no dosificar en el torneo local. Sin embargo, para el Bichi afectó más la pérdida del Monumental, que fue sancionado por una agresión a un futbolista de Gimnasia en los cuartos de final. “No pongo como excusa que jugamos en el Nacional y perdimos por eso, pero pierdes tu localía, no te sientes cómodo”, recordó el entrenador en su tribuna como comentarista en TNT Sports.
También le ha bajado el perfil a la derrota. “No me dolió nada como tampoco me fui a los extremos de estar muy alegre cuando ganas. Es un trabajo, estás acostumbrado, la gran mayoría de los jugadores pierde más partidos de los que gana”, explicó el exvolante.
En esa línea, Borghi prefiere que se le den los méritos al Pachuca por lo sucedido en esa noche: “Competíamos con un equipo muy importante y caro del fútbol mexicano, el poder adquisitivo era muy diferente. Nosotros teníamos un equipo que jugaba bien y la gente se quedó triste, yo también, pero no me voy a desgarrar la vestidura porque perdí un partido”.
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