Bolsonaro regresa este miércoles al Tribunal Supremo, que decidirá si admite acusación en su contra por golpe de Estado

Bolsonaro regresa este miércoles al Tribunal Supremo, que decidirá si admite acusación en su contra por golpe de Estado

El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro regresará este miércoles a la Corte Suprema de ese país, que retomará la vista para decidir si admite o archiva la denuncia presentada contra el exmandatario y otras siete personas por la Fiscalía brasileña por golpe de Estado e insurrección tras las elecciones de 2022, en las que ganó el actual gobernante, Luiz Inácio Lula da Silva.

Los cinco jueces que forman parte de la sala primera de la Corte -entre ellos el poderoso Alexandre de Moraes, considerado un enemigo político por el bolsonarismo-, determinarán si Bolsonaro y otros siete personas, entre ellos sus exministros Augusto Heleno (Seguridad), Walter Braga Netto (Defensa), Paulo Sérgio Nogueira y Anderson Torres (Justicia), son imputados y, por tanto, pasan a ser acusados formalmente de los delitos de rebelión, atentado contra las autoridades e intento de golpe de Estado por los ataques a las instituciones del 8 de enero de 2023.

Según esa acusación, el exmandatario (2019-2022) lideró una organización criminal que planeó impedir la investidura del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien lo derrotó en las elecciones de octubre de 2022.

Durante la primera sesión, según recoge Agencia Brasil, los magistrados rechazaron la anulación del acuerdo de culpabilidad del que fuera “mano derecha” de Bolsonaro, el coronel Mauro Cid, lo que había sido solicitado por la defensa del expresidente ultraderechista.

Asimismo, han descartado otra petición de su abogado, esta vez para celebrar el juicio en el pleno del Supremo y no en la sala, puesto que los delitos investigados habrían sido cometidos por Bolsonaro y sus socios durante el ejercicio de sus funciones.

Comparación con Trump

El exmandatario ha criticado esta decisión de los magistrados en su cuenta de la red social X, donde ha afirmado que “se elige lo que sirve al objetivo político del momento y se descarta lo que podría garantizar un juicio mínimamente justo”.

“Se trata de la mayor persecución político-judicial de la historia de Brasil, motivada por deseos inconfesables, vanidades y claros intereses políticos de impedir que participe y gane las elecciones presidenciales de 2026″, dijo el político ultraderechista.

“¿Haría lo mismo la Corte Suprema si el acusado fuera otro expresidente? El momento “conveniente” de estos cambios muestra que la regla fue creada para mí y, después de mí, puede volver a cambiar. Peor aún: en el caso de mi oponente (por Lula), la Corte Suprema anuló todo, ¡diciendo precisamente que no se había seguido el foro competente!”, declaró tras denunciar lo que ha calificado de “casuística más escandalosa de la historia del Poder Judicial brasileño”.

Bolsonaro, que espera competir en las presidenciales del próximo año pese a estar inhabilitado políticamente, enfrenta una posible pena de unos 40 años de prisión.

El exgobernante brasileño compara su situación con la del mandatario estadounidense Donald Trump, quien regresó a la Casa Blanca a pesar de sus problemas judiciales, y espera que el magnate republicano ejerza “influencia” a su favor.

La semana pasada el Tribunal Supremo rechazó otra petición del abogado de Bolsonaro, esta vez para apartar a los jueces Alexandre de Moraes -relator del caso- Flávio Dino e Cristiano Zanin del juicio contra el líder ultraderechista, quien había alegado incompatibilidad y falta de independencia debido a episodios anteriores.