De jugar en la Premier League a pasar 20 años en prisión: el drama de una leyenda del fútbol chino acusada de corrupción

De jugar en la Premier League a pasar 20 años en prisión: el drama de una leyenda del fútbol chino acusada de corrupción

En China están presenciando la caída de una figura que, hace un par de décadas, era uno de los grandes ídolos de la nación. Li Tie, exjugador de fútbol y posterior entrenador de la selección asiática, fue condenado a 20 años de prisión luego de que la justicia de dicho país descubriera que estaba envuelto en un bullado caso de corrupción y amaño de partidos.

El ocaso de una leyenda

En medio de la incipiente formación de futbolistas que ha caracterizado históricamente a China, Li Tie se alzó como una figura consular del balompié en el país más poblado del mundo. El jugador, que se desempeñaba en la posición de mediocampista, fue uno de los primeros deportistas de aquella nación en destacar en el fútbol internacional: a principios de siglo, emigró a la Premier League para defender los colores del Everton.

En el cuadro de la ciudad de Liverpool vivió cerca de cinco temporadas, llegando a participar de 40 compromisos del certamen inglés, eso sí, sin acumular goles y asistencias. Posteriormente, partió al Sheffield United, club en el que disputó un solo cotejo y se matriculó con un tanto.

No obstante, su legado más relevante en la cancha sería con su selección nacional. En el Mundial de Corea y Japón 2002, Tie formó parte de la camada de futbolistas que consiguió la primera, y única, clasificación en la historia de China a una Copa del Mundo. En dicho torneo, el combinado asiático integró el Grupo C junto a Brasil (campeón de esa edición), Turquía y Costa Rica, quedando eliminados tempraneramente con cero puntos.

Estos pergaminos por el fútbol europeo y su etapa en la adulta de China le sirvieron para convertirse en el entrenador de la selección en 2020, reemplazando a Marcelo Lippi. Sin embargo, su dirección técnica al mando de ‘Los Dragones’ se llenó rápidamente de cuestionamientos por su participación en un caso de corrupción. Precisamente, esas prácticas ilegales son las que lo tienen enfrentando a la justicia en la actualidad.

Luego de un largo juicio, el Tribunal Popular Intermedio de Xianning sentenció a 20 años de prisión a Li Tie al considerar que usó su cargo de seleccionador chino para recibir más de 50 millones de yuanes (aproximadamente siete millones de dólares) en sobornos, amaño de partidos y asegurar puestos en las convocatorias a cambio de dinero.

Tras conocer la sentencia, el acusado reconoció sus delitos en televisión y se disculpó públicamente en la cadena estatal CCTV. “Debería haber seguido el camino correcto, pero en aquel momento eran prácticas comunes en el fútbol”, dijo arrepentido.

La dura condena que sufrió la otrora leyenda no es la única, pues el entramado de corrupción involucra a más de 40 clubes y numerosos dirigentes. Liu Yi, exsecretario general de la Asociación China de Fútbol, fue multado con 11 años de prisión, mientras que el antiguo director del Departamento de Gestión de Árbitros, Tan Hai, fue penalizado a seis años y medio.

De esta manera, el fútbol de China sufre un duro golpe en sus ansias de limpiar la imagen del deporte en dicho territorio, sobre todo de cara a los intentos que mantiene la federación oriental para organizar la Copa del Mundo de 2038. Por ahora, la candidatura para albergar la cita mundial no goza de mucha probidad y pierde terreno en la FIFA.