El balance del 2024 visto por la ciudadanía

El balance del 2024 visto por la ciudadanía

El estudio de opinión Balance 2024, que se publica en la edición de hoy y que fue realizado por Descifra –una alianza estratégica entre Copesa (consorcio que edita La Tercera) y Artool-, ha entregado interesantes conclusiones acerca de la percepción de la ciudadanía en una serie de ámbitos -como el político, económico o la seguridad-, lo cual permite calibrar mejor cómo perciben la realidad los propios chilenos.

Decidor es que frente a la pregunta de cuál es el principal problema que marcó este 2024, el 49% haya señalado que lo constituye la delincuencia y el narcotráfico, algo que claramente está corroborando que la dimensión de inseguridad sigue siendo la principal pesadilla que aqueja a la mayoría de los chilenos. El estudio es claro en señalar que esta preocupación es compartida transversalmente en todos los estratos socioeconómicos y en todos los segmentos etarios. El fenómeno es aún más acuciante en la Región Metropolitana, donde el 51% lo ubica como el principal problema, versus el 44% que se registra en regiones. Hay razones fundadas para ello, tal como lo revela un balance que este medio publicó ayer, donde se da cuenta de que 2024 fue un año especialmente violento en la RM.

No debería sorprender que el 55% estime que el hecho más violento que lo impactó en 2024 haya sido precisamente el brutal asesinato de tres carabineros en la zona de Cañete. Y el que la mayoría identifique al Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, como el líder extranjero que más le gusta (35%, con marcada preferencia en los segmentos C3 y D+E), arroja luces que no deberían desatenderse, pues cuando cunde el clima de inseguridad se genera un terreno fértil para los liderazgos que prometen “mano dura”. Sin duda hacerse cargo de manera efectiva de este temor generalizado es el mayor reto que enfrenta el gobierno, pero también el conjunto de nuestro sistema político.

Debe prestarse atención que el segundo mayor problema que identifican los chilenos sea la corrupción (30%) -también con una amplia transversalidad-, lo que claramente está indicando que la ciudadanía ya no percibe este fenómeno como algo marginal, sino como un mal que está afectando seriamente al país y cuyas repercusiones son particularmente complejas, porque eso conlleva -entre otros efectos- a la gradual pérdida de confianza en las instituciones o entre los propios ciudadanos. Quizás ello explique en parte que la “crisis del poder judicial” sea identificada como el tercer mayor problema del país (10%), lo que en sí ya es un asunto preocupante y que se conecta con las conclusiones de un reciente estudio llevado a cabo por la OCDE, según el cual Chile es el país que exhibe el mayor nivel de desconfianza hacia el sistema judicial en todo el bloque.

En el ámbito político también se han arrojado luces interesantes. Los chilenos no tienen ninguna duda de que la denuncia por presunta violación que involucró al exsubsecretario Manuel Monsalve (40%) y el Caso Hermosilla (33%) son por lejos los mayores escándalos políticos de este año, lo que aparece plenamente justificado atendidas las enormes repercusiones que ambos casos están generando, además de constituir hechos inéditos. A su vez, también se consulta por el miembro del gobierno que más influye sobre el Presidente Boric, y es la ministra del Interior quien aparece liderando (34%), lo que podría estar anticipando que es una figura con un rol político que la ciudadanía ya logra distinguir.

Al consultar por la principal promesa no cumplida del Presidente Boric, el 41% señala que es la reforma al sistema de pensiones, mientras que bastante por detrás se ubica la eliminación del CAE (23%) -porcentaje sobre todo marcado en los segmentos más jóvenes-, en tanto que en tercer lugar se ubica la reforma al sistema político (14%). Banderas como el aborto libre o la negociación ramal presentan menciones muy bajas. Parece claro que de no haber un acuerdo en pensiones habrá evidentes repercusiones para el gobierno, y si bien es positivo que los cambios al sistema político sean identificados como promesa incumplida, cabe lamentar que dicha reforma sea valorada sobre todo en los segmentos socioeconómicos más altos, lo que refuerza la importancia de sensibilizar mucho más su relevancia.

En el ámbito económico, al consultarse por la peor noticia económica del año, el 30% menciona el aumento en las cuentas de la luz, seguido de la caída en la inversión por segundo año consecutivo (22%). La inflación anual cercana al 5% alcanza el 16% de las menciones, y 13% señala el bajo crecimiento. Claramente aquí lo que ha prevalecido es aquello que toca directamente al bolsillo de la población, lo que se refleja en que sobre todo mujeres y los segmentos socioeconómicos más bajos sean quienes más resienten el alza de las cuentas de la luz. Pero es decidor que una parte de la ciudadanía también ya identifique como un problema grave la merma de la inversión -esto sin duda es un dato novedoso-, porque es el talón de Aquiles de nuestra economía y que en buena medida explica las bajísimas tasas de crecimiento.

No cabe duda de que 2024 se instalará como uno de los años más intensos en materia noticiosa, lleno de eventos complejos, y justamente la utilidad de este estudio de opinión es que permite decantar mejor cómo lo han percibido los propios chilenos.