El empleo tras el covid: más ocupados, teletrabajo para algunos y el eterno reto del paro

El empleo tras el covid: más ocupados, teletrabajo para algunos y el eterno reto del paro

Madrid, 17 mar (EFECOM).- La pandemia impactó con fuerza en un mercado laboral que cinco años después ha superado las cifras de afiliación previas con el teletrabajo consolidado en algunos sectores y empresas, mayores niveles de absentismo y retos que siguen pendientes como el paro de larga duración.

Con 21,8 millones de afiliados y una tasa de paro del 10,6 % al cierre de 2024, el empleo en España hace trimestres que dio por superado el golpe que, en pocos meses de 2020, destruyó casi 1 millón de empleos.

Desde la pandemia, la tasa de paro se ha reducido casi 4 puntos y se han sumado más de 2 millones de ocupados de los que el 45 % han sido en información y comunicaciones, actividades profesionales, científicas y técnicas, educación y construcción, según señalaba el Banco de España en su último informe.

Un patrón que contrasta con el observado entre 2013 y 2019 en el que el aumento de la ocupación estuvo más concentrado en la industria manufacturera, la hostelería y el comercio.

"Ya no queda rastro de la pandemia en los datos", reflexiona a EFE el investigador de Fedea, Marcel Jansen, que recuerda la importancia que tuvieron los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) y la ayuda de Europa para sostenerlos.

Los ERTE ampararon a más de 3,5 millones de trabajadores con una herramienta que ya existía, que la reforma laboral consolidó y que después se está usando ante crisis sectoriales o impactos extraordinarios como el vivido en La Palma con el volcán o en Valencia con la dana.

"La mejora del mercado laboral se sustenta en gran parte con la llegada de inmigrantes", reflexiona Jansen, que contrasta el récord de ocupación, con más de 21 millones de afiliados, con que las tasas de actividad y paro siguen sin alcanzar los niveles previos a la crisis financiera y las brechas frente a otros países europeos.

Al cierre de 2024, la tasa de actividad, porcentaje de la población mayor de 16 años que está ocupada o buscando empleo, era del 58,49 % y la de paro del 10,61 %, según datos EPA.

Antes de la pandemia, la tasa de actividad rondaba también el 58 % y la de paro era del 14 % mientras que en 2007 la tasa de actividad rozaba el 60 % y la de paro era del 8,57 %.

"Persisten algunos problemas estructurales como el paro de larga duración o el mal funcionamiento de los servicios públicos de empleo", añade Jansen.

Junto a esas corrientes de fondo que se mantienen en el mercado laboral español, la pandemia dejo importantes cambios, como el teletrabajo, una opción inusual antes de 2020 y que, tras una implantación masiva y forzosa, se ha consolidado para el 14,6 % de los ocupados.

"Hay modelo híbrido consolidado", reflexiona el director de talento de Adecco, Alberto Gavilán, que recuerda también el cambio que ha supuesto la reforma laboral para la temporalidad que ha pasado del 28,13 % al 15,5 % al cierre de 2024, según datos del INE, al limitarse la contratación eventual anterior y popularizarse la figura del fijo discontinuo.

También se ha acentuado estos años el problema de algunos sectores para encontrar determinados perfiles.

Según datos del Banco de España, el 45,8 % de las empresas tiene problemas de mano de obra, especialmente en sectores como la agricultura, la hostelería o la construcción.

"Sigue habiendo desajustes entre lo que el mercado laboral necesita y lo que el tejido educativo ofrece", añade Gavilán quien reconoce que hay perfiles, especialmente en el ámbito tecnológico, que cambian tan rápido que las empresas no tienen margen para cubrirlas.

"Tres de cada cuatro empresas tiene problemas para cubrir vacantes y es una tendencia creciente", coincide el director de Randstad Research, Valentín Bote.

Y todo en un contexto de creciente digitalización que ha extendido el trabajo en plataformas, el uso de la IA o figuras como los nómadas digitales, cambios con impactos no solo en el mercado laboral sino también en el sector inmobiliario, el comercio, la restauración o el transporte.

También ha cambiado tras la pandemia el impacto de la salud en el mercado laboral, con un incremento de las bajas por incapacidad temporal que han dado como resultado un aumento del absentismo.

Según datos del INE, el promedio de horas no trabajadas por asalariado por incapacidad temporal ha subido hasta un 33 % entre 2019 y 2024, hasta equivaler a 11 días laborables por empleado.

Las empresas claman por resolver esta situación, en muchos casos derivada de las largas listas de espera en la atención sanitaria, que ha llevado a tratar de buscar soluciones como el acuerdo alcanzado entre Gobierno y agentes sociales para utilizar a las mutuas de accidentes en los procesos traumatológicos.

Pero no sólo la salud física ha sido objeto de debate tras la pandemia, también la mental, que ha cobrado más relevancia en unos años en los que se habla sobre los usos del tiempo y las horas de trabajo.

"Hemos sobrevivido a la pandemia pero nos ha dejado secuelas", reflexiona Bote, que también apunta a una forma diferente de percibir el trabajo y las relaciones laborales.

Y en mitad de estos cambios, el compromiso del Gobierno de reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales, una medida que afectaría a más de 12 millones de personas, pero que de momento no tiene los apoyos parlamentarios necesarios ni respaldo de la patronal.

De concretarse, supondrá uno de los mayores cambios para el mercado laboral de las últimas décadas al tocar una jornada que lleva más de 40 años sin modificarse por ley. EFECOM

Fuente

Infobae.com

Infobae.com

Lo + visto

Comentarios

Escribe un comentario