HDMI 2.2 ya está aquí. La pregunta es si merece la pena esperar por él o si por el momento podemos ignorarlo

HDMI 2.2 ya está aquí. La pregunta es si merece la pena esperar por él o si por el momento podemos ignorarlo

Cuando llegó a nuestras vidas, la norma HDMI 2.1 inició una auténtica revolución. Una de la que nos hemos beneficiado todos los jugadores que hemos apostado por ella. Y es que sus aportaciones más relevantes han adquirido sentido en el ámbito de la ejecución de videojuegos y no tanto en el de la reproducción de películas, aunque algunas de sus mejoras, como, por ejemplo, el transporte de los metadatos dinámicos de los contenidos HDR desde fuentes externas, están pensadas para el cine en casa.

Sea como sea HDMI 2.2 ya está aquí. Os hemos hablado con todo detalle de sus especificaciones en el artículo que le hemos dedicado hoy mismo, por lo que en este texto lo que os proponemos es indagar en sus promesas para determinar si realmente merece la pena esperar esta norma con los brazos abiertos. O si, por el contrario, no es tan relevante como lo fue en su momento HDMI 2.1. Un dato importante para ir abriendo boca: los primeros dispositivos y cables compatibles con la norma HDMI 2.2 llegarán durante el primer semestre de 2025.

Los jugadores ganamos, pero nos toca esperar

La especificación más impactante de HDMI 2.2 es, sin lugar a dudas, la velocidad de transferencia máxima que nos promete: nada menos que 96 Gbps. Esta cifra por sí sola no nos dice gran cosa, pero si la ponemos en contexto y tenemos en cuenta que la norma HDMI 2.1 alcanza los 48 Gbps, y que la revisión 2.0 trabaja como mucho a 18 Gbps, el panorama cambia. Las implicaciones que tiene este incremento de la velocidad de transferencia son múltiples e interesantes.

Y es que HDMI 2.2 es capaz de transportar imágenes 4K UHD (2160p) con una cadencia máxima de 480 imágenes por segundo. Si nos ceñimos a la reproducción de películas esta prestación por el momento no aporta nada, pero si tenemos presente que en el mercado podemos encontrar monitores con un refresco de 480 Hz su interés va en aumento. Lo que sucede, y es importante que no lo pasemos por alto, es que la resolución de estas pantallas suele ser 2.560 x 1.440 puntos (se conoce habitualmente como QHD o 2K), o, incluso, 1080p (1.920 x 1.080 puntos).

Los monitores con un panel 4K UHD capaces de trabajar a una frecuencia de refresco máxima de 480 Hz llegarán, podemos estar seguros, pero por el momento a los jugadores nos toca esperar. En cualquier caso, esto no es todo. Otra característica de HDMI 2.2 es que puede transportar señales con resolución 12K a una cadencia máxima de 120 fotogramas por segundo. Más de lo mismo. Suena bien, y posiblemente esta prestación dilatará la vida útil de esta norma, pero a medio plazo es muy poco probable que vayamos a necesitar transportar señales 12K.

Todavía nos quedan dos prestaciones más de HDMI 2.2 que merece la pena que no pasemos por alto. HDMI Fixed Rate Link es un protocolo que persigue asegurar la estabilidad y la integridad del enlace para optimizar la transferencia de la información, y LIP (Latency Indication Protocol) es un protocolo que vela expresamente por la sincronización del audio y el vídeo cuando conectamos varios dispositivos compatibles, como, por ejemplo, un televisor y una barra de sonido.

En definitiva, HDMI 2.2 representa un salto importante frente a la norma 2.1 desde un punto de vista estrictamente técnico, pero, como acabamos de ver, a corto plazo es poco probable que podamos sacarle partido. Eso sí, cuando lleguen los monitores 4K UHD de 480 Hz los jugadores nos vamos a frotar las manos, si es que se dejan comprar.

Imagen | Srattha Nualsate

En Xataka | HDMI 2.2: novedades de este nuevo estándar, fecha de salida y comparación con anteriores versiones

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La noticia HDMI 2.2 ya está aquí. La pregunta es si merece la pena esperar por él o si por el momento podemos ignorarlo fue publicada originalmente en Xataka por Juan Carlos López .