La lista de los 10 fugitivos más buscados del FBI cumple 75 años: sus ideólogos y algunos de los criminales que hicieron historia

La lista de los 10 fugitivos más buscados del FBI cumple 75 años: sus ideólogos y algunos de los criminales que hicieron historia

Asesinos seriales, violadores, líderes de sectas, capo mafias, secuestradores, ladrones de bancos y más fueron parte de este club más temido, que puso en vilo a Estados Unidos antes y después de sus órdenes de captura. Cómo funciona esta clasificación y cuántos hombres y mujeres fueron incluidos desde sus inicios

“Buscado”, rezaban los carteles en las calles polvorientas de las películas del Far West. Hace 75 años, el FBI creó un equivalente que fue adoptado por la cultura estadounidense: la lista de “Los Diez Fugitivos Más Buscados”. Desde entonces, los criminales más peligrosos formaron parte de esa selección.

Se estima que al menos 535 fugitivos fueron incluidos en la lista de los más buscados por el FBI, criminales que huyeron de la justicia federal y que representan una amenaza particularmente peligrosa para la sociedad norteamericana. Más de 496 fueron capturados, un tercio de ellos gracias a la cooperación del público alertado por los carteles.

Antes de la creación de la primera lista, hubo un antecedente que se remonta a la Ley Seca, cuando la Comisión de Crímenes de Chicago elaboró un registro con los 28 “enemigos públicos”. En la década del 30, J. Edgar Hoover, entonces director del FBI, y su equipo utilizaban ese término para referirse a los criminales de la talla de John Dillinger, Al Capone y Baby Face Nelson.

La lista nació de una conversación en 1949 entre Hoover y el periodista William Kinsey Hutchinson, editor en jefe de la agencia News Service (que luego se convertiría en United Press International). Hutchinson quería saber quiénes eran “los peores entre los peores”. Hoover le entregó una lista y el 8 de febrero de 1949, todos los diarios de Estados Unidos la publicaron, generando un gran impacto mediático y, al mismo tiempo, logrando su objetivo: obtener nuevas pistas sobre los fugitivos.

El registro se restringe solo a fugitivos cuya identidad sea conocida, que cuenten con una fotografía y tengan órdenes de arresto. Por esta razón, algunos asesinos de gran calibre quedaron fuera, como Unabomber, quien durante dos décadas envió bombas por correo, o el Asesino del Zodíaco, quien sembró el terror entre las décadas del 60 y 70 en el norte de California, burlándose de la policía y medios de comunicación con cartas cifradas y mensajes crípticos sobre sus crímenes en serie.

El proceso de selección para este top 10 sigue un estricto procedimiento: la División de Investigación Criminal solicita a las 56 oficinas de campo del FBI que le envíen los nombres de los fugitivos más peligrosos. Luego, los agentes especiales de esa división, junto con la Oficina de Asuntos Públicos, revisan las nominaciones y se envían los nombres seleccionados a la dirección general del FBI para su aprobación.

Uno de los responsables a cargo de la cartelería, Christopher Allen, contó en una oportunidad que el icónico aviso de “Se busca”, se exhibe en la actualidad en muchos más lugares que antes. Originalmente, los carteles se colocaban en oficinas de correos, hoy en día poco frecuentadas. Actualmente, aparecen en vallas publicitarias gracias a acuerdos con agencias de publicidad y, en algunos casos, están escritos en distintos idiomas. Sin embargo, el espacio donde más impacto tienen es en las redes sociales, con publicaciones en Facebook y X, donde se resaltan las caras de los más buscados.

Según el FBI, esta lista fue concebida para dar a conocer a los fugitivos especialmente peligrosos que, de otra manera no captarían la atención a nivel nacional.

Algunos de los fugitivos más notorios

—Thomas James Holden fue el primero en integrar la lista. Su carrera delictiva se había iniciado en 1920 con el robo de un tren de correo. En 1930 se fugó de una prisión en Leavenworth y fue recapturado en un campo de golf en Kansas City. En 1949, mientras cumplía libertad condicional, mató a su esposa y dos hermanos tras una discusión mientras bebían. El FBI lo capturó 13 meses después, tras recibir un aviso de un hombre de Oregón.

— La hondureña Ruth Eisemann-Schier fue la primera mujer en aparecer en la lista, en 1968 de las 10 mujeres que fueron incorporadas en su totalidad. Junto a su novio Gary Steven Krist secuestraron a Barbara Jane Mackle, una joven de 20 años, con una crueldad sin límites. La enterraron viva en una caja y exigieron un rescate de 500 mil dólares. Mackle, hija de un agente inmobiliario de Miami, estuvo 83 horas bajo tierra hasta ser rescatada con vida. Los secuestradores fueron arrestados cuando la policía encontró su coche abandonado con una foto en la guantera de la víctima sosteniendo un cartel que decía “secuestrada”. Eisemann estuvo prófuga casi 80 días hasta su captura en Oklahoma. Fue condenada a 7 años de prisión, aunque solo cumplió cuatro años antes de ser liberada y deportada a Honduras.

— Ted Bundy figuró en la lista de los Diez más buscados en 1978, luego de su segunda fuga de prisión. El asesino en serie escapó gracias a una dieta estricta que le permitió deslizarse por un hueco del techo de su celda. Esta espectacular fuga le permitió salir y cometer más atrocidades. Fue finalmente capturado el 15 de diciembre en Pensacola, Florida, después de que un oficial de la policía lo detuvo por conducir un auto robado. Bundy fue ejecutado en la silla eléctrica el 24 de enero de 1989.

— Mir Animal Qazi fue buscado durante cuatro años y medio. En 1993, abrió fuego con una rifle AK-47 contra vehículos que esperaban para entrar a la sede de la CIA en Virginia, matando a dos empleados, Lasing Bennett y Frank Darling, e hiriendo a otros tres. El móvil del ataque, según declaró, fue por oponerse a la política exterior de Estados Unidos en Medio Oriente. Después del tiroteo, Qazi huyó y fue capturado en Pakistán en 1997 y entregado a las autoridades estadounidenses. Fue juzgado y condenado a muerte por inyección letal en 2002.

— Ramzi Yousef, responsable del atentado al World Trade Center en 1993, se mantuvo dos años entre los diez hasta que fue capturado en Pakistán. Asesinó en total seis personas e hirió a miles. El plan era derrumbar la Torre Norte para que colapsara sobre la Torre Sur, aunque no lo logró. Después de la búsqueda internacional y detención fue declarado culpable, sentenciado a cadena perpetua sin libertad condicional. Actualmente cumple sentencia en la prisión de máxima seguridad Supermax, en Colorado.

— Andrew Cunanan, el asesino del diseñador Gianni Versace fue parte de la famosa lista, aunque no logró ser capturado. En 3 meses meses mató a cinco personas antes de suicidarse en 1997, cuando su casa flotante de Miami Beach estaba rodeada por la policía. Sus víctimas fueron Jeffrey Trail, un antiguo amigo; David Madson, un ex amante; William Reese, un sepulturero al que le robó la camioneta y por último al famoso diseñador en la puerta de su mansión. Cunanan se suicidó ocho días después del asesinato de Versace (y un mes más tarde de ser incluido en la lista).

— James “Whitey” Bulger fue un notorio jefe del crimen organizado estadounidense que logró escabullirse a lo largo de 16 años, después de cortar con su vida anterior en Boston, Massachusetts. Su estilo de vida asociado a las actividades ilícitas y delictivas- tráfico de drogas, lavado de dinero y múltiples asesinatos-, arrancó en 1970 y se prolongó hasta mediados de 1990. Bulger disfrutó en gran medida de sus 16 años como fugitivo y vivió apaciblemente en una localidad costera de California con su novia. El FBI montó una masiva campaña mediática y Bulger apareció 16 veces en “En los 10 más buscados de América”. Finalmente, fue capturado en 2011 en Santa Mónica. El Boston Globe informó que una vecina de Bulger –una ex Miss Islandia– llamó al FBI tras ver un reporte en CNN. Su recompensa fue de 2,1 millones de dólares. Bulger murió asesinado en prisión en 2018.

— Warren Jeffs, el líder de una secta polígama, tuvo lugar en la lista más peligrosa en 2006. Era el presidente de la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Después de ser acusado por abuso sexual infantil y ser cómplice de una violación pudo evadir la captura a lo largo de un año y mantener el control sobre su iglesia, sobre la que mantenía un poder absoluto, situación que complicó la forma de dar con su paradero. Fue arrestado el 28 de agosto de 2006, cerca de Las Vegas, en una parada de tráfico en la Interestatal 15, gracias a que un patrullero de Nevada detuvo un vehículo en el que viajaban su hermano y una de sus esposas. Jeffs fue declarado culpable de agresión sexual por la violación de menores de edad. Fue condenado a cadena perpetua más 20 años adicionales. Sigue encarcelado en Texas.

— Leslie Isben Rogge fue el primer fugitivo en ser identificado gracias al sitio Web del FBI. Su búsqueda comenzó cuando se escapó de la Penitenciaría de Leavenworth, tras sobornar a un guardia. Lo suyo eran los asaltos menores como autos y también a gran escala, como bancos. Desde su fuga hasta su captura en 1991 pasaron seis años, tiempo que se mantuvo en la lista de los más buscados.

— “Se busca”. Víctor Manuel Gerena sigue prófugo desde 1984, cuando traicionó a dos compañeros de trabajo en su vehículo blindado del banco Wells Fargo. Los maniató y huyó con siete millones de dólares y nunca más se supo de él. El FBI aún ofrece una recompensa de un millón de dólares por información sobre su paradero.

En la actualidad, se pueden ver los 10 más buscados en el sitio https://www.fbi.gov/wanted/topten. Hay 9 hombres y una mujer.