La promesa incumplida de Boric que pesa en los gobernadores regionales recién asumidos

La promesa incumplida de Boric que pesa en los gobernadores regionales recién asumidos

Corría septiembre de 2021 y el entonces diputado y candidato presidencial, Gabriel Boric, sostenía con vehemencia que “si el pueblo de Chile nos da el honor de poder representarlos de aquí en adelante, no les quepa duda que en nuestro futuro gobierno se va a terminar la figura del delegado presidencial”. Sin embargo, la idea quedó finalmente solo en intenciones y los ayer recién asumidos gobernadores regionales se siguen sintiendo los grandes perjudicados por la nueva postura.

Boric no solo expresó como candidato a La Moneda sus intenciones, sino que también dejó por escrito en su programa de gobierno la idea de potenciar a los gobernadores regionales y eliminar la figura de los delegados presidenciales regionales, que son nombrados por el Ejecutivo. En el punto 38 del texto denominado “Descentralización sin letra chica”, prometía eliminar la figura del delegado presidencial “por su duplicación de funciones con los nuevos gobernadores regionales”.

En noviembre de 2022, a pocos meses de asumir como ministra del Interior, Carolina Tohá, tras una reunión con los gobernadores regionales recalcaba la intención del Ejecutivo de eliminar a los delegados presidenciales señalando que “hace dos días tuvimos una reunión con todos los gobernadores del país y una de las cosas que dejamos muy claramente establecidas en esa reunión es que ese compromiso —eliminar las delegaciones— que el Presidente ha tomado está vigente y se va a cumplir”.

Sin embargo, el gobierno echó pie atrás con la idea. Fue la propia Carolina Tohá, en julio de 2024, quien transparentó la nueva posición de La Moneda. En el marco de la instalación del Tercer Congreso de Descentralización, la jefa de gabinete sostuvo que “administrando el gobierno se llegó a la conclusión que no tener delegados presidenciales en las regiones no era una buena idea y que el gobierno iba a quedar sin orientación”.

El debate se volvió a instalar tras la discusión del proyecto que terminó creando el Ministerio de Seguridad. En diciembre pasado, el entonces presidente de la Asociación de Gobernadores y Gobernadoras Regionales de Chile (Agorechi), Rodrigo Mundaca (Ind.), sostuvo que con la nueva cartera se creaba una figura de un seremi de seguridad y por el otro lado, existía un delegado regional presidencial, dos autoridades designadas por el gobierno central y que chocarían en materia de seguridad con los gobernadores. “Había una promesa presidencial de terminar con los delegados regionales presidenciales y este proyecto lo que hace es fortalecerlos y fortalecer la centralización”, sostuvo entonces la autoridad regional de Valparaíso.

Este lunes, ante la presencia de varios ministros, encabezados por Tohá, y otras autoridades, al asumir como gobernador de la Región Metropolitano, Claudio Orrego (Ind.), insistió en la necesidad de fortalecer su cargo: “Se lo digo al gobierno central, este o el que venga, vamos a luchar para que se nos estreguen más atribuciones”.

Asimismo dijo que “mi primer llamado al gobierno es que le ponga urgencia al proyecto de ley que le entrega las atribuciones de prevención del delito a los gobiernos regionales. Es incomprensible que, en medio de esta pandemia de homicidios, los gobiernos regionales, que tenemos liderazgos, que tenemos representatividad y tenemos capacidad de coordinación y recursos, estemos fuera de la mesa”, añadió, quien antes ya se había manifestado “decepcionado” por la promesa incumplida de Boric de eliminar a los delegados presidenciales.

Horas antes el propio Mundaca también lanzó nuevas críticas al gobierno. “Se lo he dicho al Presidente y todo el mundo lo sabe, que estoy absolutamente disconforme con el proceso de descentralización en lo político, porque siempre hemos planteado que hay que terminar con la figura del delegado presidencial”, señaló el gobernador en entrevista con El Mercurio de Valparaíso, apuntando además a Tohá como una “fuerza regresiva” dentro del gobierno.

En tanto, el recién asumido gobernador de la Región de Los Lagos, Alejandro Santana (RN) señaló a La Tercera que el fortalecimiento del rol de los gobernadores y la posible eliminación del cargo de los delegados presidenciales tiene que discutirse ya en el próximo gobierno. “El tema de los delegados presidenciales es un compromiso del Presidente Boric que compartimos, pero que no va a cumplir. Y en esa línea esperamos hacer frente los gobernadores con el futuro gobierno que sea, para aumentar la descentralización y obviamente la autonomía de las decisiones”, recalcó.

En la misma línea, el recién asumido gobernador de la Región de Aysén, Marcelo Santana (UDI), sostuvo que “creo que nunca está bien comprometer cuestiones que después uno no va a hacer y en el ejercicio del cargo, yo fui alcalde antes, uno se da cuenta que hay cargos que en su momento tenían razón de ser y hoy día ya no la tienen y uno de ellos es el cargo de delegados, que tienen funciones que perfectamente podrían se traspasadas a los gobiernos regionales u otra institucionalidad y esto favorecería mucho a la coordinación y por otra parte, disminuiría el gasto estatal que hoy existe”

Cabe recordar que entre las atribuciones del gobernador regional están básicamente formular políticas de desarrollo de la región, sometiendo al consejo regional las estrategias y proyectos de planes regionales y presupuestos. Además de fiscalizar, según corresponda, a los servicios públicos que dependan o se relacionen con el gobierno regional respectivo. También promulgar, previo acuerdo del consejo regional, el plan regional de ordenamiento territorial, los planes reguladores metropolitanos e intercomunales, comunales y seccionales y los planos de detalle de planes reguladores intercomunales.

En tanto, los delegados presidenciales tienen como atribuciones en dirigir las tareas de gobierno interior en la región, de conformidad con las orientaciones, órdenes e instrucciones que le imparta el Presidente o a través del Ministerio del Interior. Además, en materia de seguridad deben velar porque en el territorio de su jurisdicción se respete la tranquilidad, orden público y resguardo de las personas y bienes y requerir el auxilio de la fuerza pública en el territorio de su jurisdicción, en conformidad a la ley, entre otros.