Las dispares reacciones de parlamentarios por postergación de proyecto de ley de aborto libre

Las dispares reacciones de parlamentarios por postergación de proyecto de ley de aborto libre

La ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, anunció que se postergaba la presentación del proyecto de aborto libre, ante ello, parlamentarios oficialistas señalaron que es “una deuda pendiente” del programa de gobierno y, por otra parte, desde la oposición indicaron que no era una “prioridad”.

Esto en luego de que se confirmara que la iniciativa no será presentada -como fue programado- en diciembre del presente año, a pesar de que el Presidente Gabriel Boric así lo prometió en su tercera Cuenta Pública en junio pasado.

Tras esto, el cardenal de la Iglesia Católica, Fernando Chomalí, calificó como “un gran regalo” el aplazamiento del proyecto, a lo que la secretaria de Estado respondió tajantemente enfatizando que “las decisiones que se toman no se hacen pensando en los deseos de los príncipes de la iglesia, que es lo que significa ser un cardenal”.

Añadiendo que “la mayoría de la población no está de acuerdo con criminalizar el aborto”.

Debido a esto diversos parlamentarios reaccionaron por la postergación del proyecto y por la respuesta de la ministra Orellana al arzobispo.

“Deuda pendiente” e “iniciativa destructiva”

Las opiniones en torno al proyecto de ley de aborto sin causales son disparejas, en donde el oficialismo defiende la propuesta mientras la oposición insiste en que no es una prioridad.

Desde el Frente Amplio, la diputada Lorena Fries se refirió a ello señalando que “no es lo central el que se deje para marzo del próximo años”, indicando que lo primordial es sacar el reglamento para la ley de aborto en tres causales.

“Y, en segundo lugar, ingresaría la ley de aborto y obviamente lo que uno espera es que haya un debate, un debate social sobre el aborto, no sólo entre los actores políticos, porque entre otras cosas en el ámbito social sí hay crecientemente un apoyo para el aborto por plazo”.

La diputada Ana María Bravo (PS), presidenta de la comisión de Mujeres aseguró que esto es un tema “altamente valórico” y que se deben escuchar todos los puntos de vista. Sin embargo, recalcó que es importante dar cuenta de que existen abortos “clandestinos” y que “arriesga la vida de cientos de mujeres”.

“Estamos a puertas del 2025 y existe una clara necesidad de poner en discusión este tema. Y por eso esperamos, de verdad, que en marzo se presente este proyecto de ley y no se siga postergando a la espera del pronunciamiento de la Contraloría respecto de la normativa aplicable al aborto en tres causales”, sostuvo.

Por su parte, la parlamentaria Ana María Gazmuri (AH) planteó que si bien es necesario darle prioridad a otras iniciativas, este sigue siendo un proyecto muy “significativo” y “esperado”. Además, aseguró que esto no es un “gustito” del gobierno, sino que es el “resultado de la larga lucha sostenida por miles de mujeres”.

“El proyecto de aborto legal es una propuesta anunciada por el gobierno del Presidente Boric, pero será una discusión que tendremos que dar como sociedad, no solo en el Congreso, en términos de salud, en términos de derechos, pero en términos políticos la discusión es obsoleta”, indicó Gazmuri.

Mientras que la diputada Carolina Tello (FA) afirmó que “la postergación del ingreso del proyecto de ley de aborto legal para marzo refleja el compromiso del gobierno con abordar este tema de manera seria y responsable”.

Añadiendo que: “Reconocemos que esta iniciativa es una deuda pendiente con el programa del Presidente Gabriel Boric, pero entendemos que se trata de un debate complejo que requiere un amplio diálogo y la construcción de consensos sólidos”.

Sin embargo, desde la oposición el pensamiento va al otro extremo, la diputada Marlene Pérez (IND.-UDI) expresó que considera “prudente” y “sensato” retrasar la presentación del proyecto porque no figura como “prioridad” para la ciudadanía, y que la iniciativa solo viene a “generar división y hoy día se necesitan acuerdos”.

Mientras que el diputado de Renovación Nacional, Eduardo Durán, remarcó que “el gobierno no debe enviar ni este año, ni nunca, el proyecto de aborto, porque cualquier iniciativa que elimine la vida de un ser humano es destructiva. Estamos hablando de una persona con dignidad propia, un ser único e irrepetible, y no de un objeto desechable”.

La parlamentaria del mismo partido, Camila Flores, reiteró que “en múltiples ocasiones hemos dicho no al aborto libre, pero ellos (gobierno) siguen insistiendo para desviar la atención, para poner este tema en el tapete y no discutir sobre las prioridades que realmente tenemos las mujeres y todas nuestras compatriotas en el país”.

Asimismo, la diputada Yovana Ahumada (IND.) apuntó que “es evidente que el gobierno no cuenta con el respaldo político para avanzar con este proyecto, lo que refuerza que sólo se levantó como una cortina de humo para generar adhesión en su sector”.

“Me sorprende que la ministra Orellana ahora alce la voz para defender un proyecto que busca acabar con vidas inocentes cuando poco y nada defendió a las mujeres vulneradas dentro de su propio gobierno. Como diputada del Partido Social Cristiano siempre defenderé la vida que está por nacer y estoy segura que la mayoría de los chilenos comparten esta postura”, agregó la parlamentaria.

La respuesta a cardenal Chomalí

Junto con la postergación, los parlamentarios abordaron la respuesta de la ministra Orellana al cardenal Fernando Chomalí, la diputada Camila Flores calificó el tono como “violento” y “despectivo”.

“Lo que hace simplemente es constatar la realidad, que a ellos no les importa la opinión de quienes no piensan como ellos. A ellos simplemente les interesa hablarle a su nicho electoral, ese que bordea el 30%, a esa barra brava, que hagan lo que hagan, los siguen apoyando”, añadió.

Mientras que por su parte el diputado Ricardo Cifuentes (DC), a través de su cuenta de X, expresó que “Fea, irónica y destemplada respuesta de ministra de la Mujer Antonia Orellana a Cardenal Chomalí. Las formas, el respeto entre las instituciones y sus representantes. Además de la cordialidad, son fundamentales para la democracia”.

Por otro lado, la diputada Gazmuri, indicó que “el arzobispo de Santiago puede tener una opinión sobre este tema y emitirla desde su posición de poder, mientras calla frente a otros temas, pero es ingenuo creer que su opinión puede influir en la discusión o causar algún tipo de repercusión en las mujeres. En ese mismo sentido, es importante recordar que la lucha por el aborto legal trasciende colores políticos, porque aquí se trata de derechos, de salud y por lo mismo, es urgente para las mujeres”.