Mar Blanco: Cocina fusión que deslumbra frente a la playa de matanzas

Mar Blanco: Cocina fusión que deslumbra frente a la playa de matanzas

El Ciudadano

Por Álvaro Bustos Barrera

En plena época estival hay quienes se preguntan hacia dónde dirigirse. Algunos prefieren la zona norte, otros la sur y también los que buscan no alejarse tanto de la capital. A solo 2 horas y 30 minutos aproximadamente de Santiago, por la Ruta 78 o Autopista del Sol y dueño de una vista sacada de una postal turística, se encuentra el Hotel Mar Blanco de Matanzas, comuna de Navidad, en la Región del Libertador Bernardo O’Higgins.

Un espacio que está ubicado en calle Carlos Ibáñez del Campo s/n frente a la playa y que además de contar con cómodas habitaciones y otros servicios, cuenta con un restaurant que bien vale la pena conocer y visitar por su reconocida cocina fusión, que incluye pescados y mariscos de la zona.   

Visité el privilegiado lugar que deslumbra con sabores típicos de Chile, pero incorporando técnicas de otros países como Perú y España. Lo primero que llamó mi atención al ingresar al restaurant fue la impresionante vista al mar, una suave brisa, fanáticos de los deportes acuáticos practicando kitsurf y windsurf, además de un espectáculo natural donde aves acechaban un cardumen en la orilla de la playa.

Su cocina está a cargo del chef peruano Miguel Castro, quien basa su repertorio en los exquisitos y privilegiados productos del mar que salen en la zona, pero no solo eso, imprime un sello propio a sus preparaciones además de agregar técnicas de la reconocida cocina peruana y algunos toques mediterráneos. 

La zona es amplia, con un sector interior que goza de unas 15 mesas bien distribuidas y cada una bien montada. Luego, traspasando unos ventanales, se encuentra la terraza con vista al mar que, si bien es reducida, logra albergar sin inconvenientes a una buena cantidad de comensales.

Para iniciar este viaje culinario te recomendamos probar el pisco sour clásico y balanceado que ofrecen en Mar Blanco. Un picoteo previo a los fondos es una opción válida donde destacan los camarones apanados rellenos, aros de calamar tempura, mix de empanadas, tabla marina o las papas fritas rústicas.

También sugerimos el filete de tataky con salsa de aceitunas moradas, una elaboración fresca, distinta y rica en sabor con gruesas láminas de res, alcaparras fritas y una galleta de queso parmesano que aporta crocancia.   

En cuanto a las opciones de plato principal, el restaurant cuenta con una carta variada y con preparaciones que van desde exquisitos pescados extraídos de la costa de O´Higgins como róbalo, corvina, reineta, albacora o congrio, hasta mariscos tan cotizados como piures, ostiones, locos y erizos.

La cocina tiene un sello definido donde la fusión de distintos países se hace presente en cada preparación, según comenta el chef peruano Miguel Castro, de vasta experiencia en su natal Lima, Santiago y hoy día en Matanzas. “La idea es ofrecer platos clásicos de la cocina chilena con toques gourmet, pero siempre privilegiando el sabor”, comenta.

Otro imperdible es el róbalo con habas y salsa ácida. Un corte de pescado fresco, en su punto de cocción que, acompañado de legumbres y unos aros de calamar, acoplan de manera perfecta en sabor y texturas. Además, está el caldo fusión de congrio, una reversión del clásico caldillo, pero que en esta oportunidad se realza con dashi japonés y con un toque de ají amarillo peruano. Una elaboración perfecta y que no falla. 

La repostería en este lugar es algo que resalta por su identidad y frescura. Cada uno de los postres es elaborado en el restaurante, como el brownie, chessecake o la panacota, los que cuentan con una versión propia para sorprender al público.   

El Hotel Mar Blanco también ofrece nueve habitaciones cómodas y muy espaciosas con vista al mar, singles y familiares, que incluyen desayuno, baño privado, bañera de hidromasaje, Wi-Fi, TV por cable, calefacción, mesa de billar y estacionamiento gratuito frente a las instalaciones. Si te quedas alojando en el lugar, podrás disfrutar no sólo de una exquisita gastronomía, sino que también del buen servicio del equipo que trabaja en el lugar, que te harán sentir como en casa.

En resumen, el restaurant Mar Blanco de Matanzas, cumple con ofrecer una cocina fusión bien lograda y la acertada utilización de productos locales, ingredientes frescos en un entorno privilegiado y aires costeros, que te sorprenderá con una propuesta culinaria con lo mejor de la región de O’Higgins.

Evaluación: Muy Bueno

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