Revuelta entre republicanos y Chile Vamos amenaza con poner una lápida al acuerdo del gobierno por reforma de pensiones

Revuelta entre republicanos y Chile Vamos amenaza con poner una lápida al acuerdo del gobierno por reforma de pensiones

“Para nosotros todas las cotizaciones deben ir a las cuentas de ahorro, y para el gobierno una parte debe ir a pagar pensiones. Eso para nosotros no es aceptable”.

Con esas palabras el diputado y presidente de la UDI, Guillermo Ramírez, cerró definitivamente la puerta a un acuerdo en pensiones con el gobierno en uno de los nudos principales del proyecto: la distribución del 6% de cotización adicional.

La afirmación del parlamentario no aparece de la nada. Viene antecedida de una fuerte embestida del Partido Republicano en su contra por haber insinuado la posibilidad de un acuerdo con el gobierno en torno a la cotización adicional.

Este lunes en una entrevista con Radio Agricultura, el líder gremialista aseguró que “el único reparto -que nosotros lo votamos hace un año ya- que para nosotros es aceptable, es esa parte de la cotización que va a igualar pensión de hombres con mujeres (...) En la Cámara votamos a favor de un pequeño reparto que iguala las pensiones de hombres y mujeres, y ese es el reparto que nosotros consideramos que es justo: el 0,5 puntos de cotización de los 6 adicionales”.

Esas palabras le costaron críticas automáticas del Partido Republicano.

“En menos de 15 días restituyen presupuesto al INDH, crean un nuevo ministerio y entregan parte de la cotización de todos los trabajadores a un sistema de reparto. ¿Todavía hay quienes se preguntan por qué es importante que los republicanos estemos en primera vuelta?”, apuntó el presidente de esa colectividad, Arturo Squella.

José Antonio Kast, por su parte, indicó que “como era esperable, Chile Vamos comienza a preparar el terreno para ceder y entregarle a la izquierda los ahorros de nuestras pensiones. Chile necesita un acuerdo en pensiones, pero no un mal acuerdo que les quite a los chilenos sus ahorros”.

En ese contexto, Ramírez decidió salir a explicar sus declaraciones. “Lo que se votó es igualar la tabla de pensiones entre hombres y mujeres. Y no se hace a través de reparto. De hecho, se rechaza la cotización adicional con lo que se impide cualquier tipo de reparto. Ayer cometí un error al hablar de reparto, porque no lo es. Es una compensación que se avalúa en casi medio punto de cotización. Para esa compensación hay distintas fórmulas”, dijo a La Tercera.

Los acercamientos previos

El impasse, explican fuentes del sector, tiene un tema de fondo: que efectivamente en Chile Vamos (UDI, RN y Evópoli) hay un grupo liderado por el presidente de RN, Rodrigo Galilea, que busca sacar adelante un acuerdo en pensiones y que, en ese contexto, si bien siempre se ha reconocido el 6% como una línea roja, era una conversación que hasta el momento no se daba por cerrada.

Particularmente en RN, dicen fuentes de la colectividad, el tema es mirado con preocupación por Galilea. En el partido, no solo hay una mala evaluación de la intervención de Ramírez que, insisten, al no conocer el estado de las conversaciones comete un error evitable, sino también lamentan que la discusión se haya visto empañada por las críticas entre la UDI y republicanos. Por lo mismo, la decisión hasta el momento ha sido no involucrarse.

En ese sentido, algunos al interior de la coalición no dudan en reconocer que el diputado gremialista enredó el panorama para las últimas tratativas, pues no solamente retrocedió en posiciones que en la conversación entre el Senado y el gobierno ya estaban avanzadas, sino también dejó entrever que en la reforma previsional, pareciera ser que será la postura del Partido Republicano la que prime en la oposición.

Y es que hace tan solo unas semanas todo apuntaba a que, después de varios meses de negociación, se acercaban las posiciones en torno al 6% de cotización extra.

Según reconocían en Chile Vamos, había disposición para destinar una parte a solidaridad, siempre y cuando se respetaran ciertos términos: que fuera menos del 3% del total, condicionado a que la mayor parte fuera transitoria y mediante un préstamo.

Así, la postura de la UDI terminó con cualquier posibilidad de acordar esta fórmula. Esto, pese a que en el sector insisten que de ganar las próximas elecciones presidenciales, la relación con el actual oficialismo se hará más difícil y no van a conseguir un mejor acuerdo, donde la mayor parte de la cotización adicional se destine a cuentas individuales.

Lo anterior, sobre todo considerando que la propuesta que presentó el gobierno contempla que un 3% se destine a cuentas individuales, que un 1% vaya de manera permanente a un seguro social, y que un 2% sea un préstamo a este fondo común por unos 20 años.

Ese tema, junto a la reorganización de la industria, ha sido parte de las principales conversaciones que en las últimas semanas han sostenido Galilea y sus pares de la Comisión de Trabajo del Senado, Juan Antonio Coloma (UDI) y Luciano Cruz-Coke (Evópoli), con la jefa de la cartera, Jeannette Jara.

Coloma, de hecho, defendió la declaración de Ramírez. “Yo comparto lo que ha planteado exactamente. Que un hombre y una mujer a la misma edad, voy a poner el ejemplo de 65 años, con el mismo ahorro, póngale cualquier cantidad, se ha ahorrado 50 millones en su vida, hoy día la jubilación es distinta, por el tema de la longevidad (...). Y creo que hay que repararlo. Y eso se hace a través de la integración individual, por un mayor aumento a la mujer”.

La diputada y jefa de bancada de RN, Ximena Ossandón, en tanto, explicó que “no es un reparto. Nosotros en el primer trámite de la reforma de pensiones, RN hizo justamente una propuesta al gobierno, donde existía una solidaridad intrageneracional entre los hombres que estaban cotizando y las mujeres que también estaban cotizando justamente para solucionar este problema. Y nosotros estamos dispuestos a seguir en ese camino. Eso no es reparto, eso es solidaridad”.

Por su parte, el senador de la UDI Iván Moreira, uno de los principales impulsores de un acuerdo en pensiones, aseguró que “la ultraderecha está confundiendo a la ciudadanía porque no quiere reforma. No quiere igualar las pensiones de mujeres y hombres. Votó en contra. Nosotros estamos empeñados en buscar un buen acuerdo para los jubilados, es lo que el país demanda, pero estamos firmes con el 6% para los cotizantes. En eso la UDI fijó una posición: nadie ha cedido nada a reparto”.

El domingo, Moreira ya había reiterado que “lo esencial es el 6% que, a nuestro juicio, tiene que ir a la cotización individual”.