El Loop

El Loop

El Presidente Boric, al recordarnos que durante su mandato no hemos presenciado protestas como en 2011 o 2019, y atribuirlo a su capacidad de ofrecer gobernabilidad, ha abierto el debate sobre qué podríamos esperar en esta materia durante un eventual gobierno de derecha y cuán competentes son los bloques de ese sector para ofrecer dicho atributo, que es la capacidad de ejercer el poder, más allá de si se hace bien o mal, de manera democrática o autoritaria.

El Presidente Piñera convivió con muchas e intensas protestas que tuvieron a su administración pendiendo de un hilo, situación que Boric ha estado lejos de experimentar. Visto así, es cierto que Boric ha visto la gobernabilidad notablemente menos amenazada que su antecesor. La pregunta es si esto permite concluir que la izquierda ha desarrollado esta capacidad más que la derecha o, atendiendo la duda que instaló Landerretche, si más que ofrecer gobernabilidad, una parte de la izquierda es capaz de ofrecer ingobernabilidad siendo oposición. Pero la izquierda tiene sus propias sospechas respecto de otros grupos de interés que, según algunos de sus representantes, torpedearía su gobernabilidad. Ese sería el caso de los empresarios y su aparente indisposición a invertir cuando los gobiernos son de ese signo. Así, cada sector enfrenta sus propios desafíos de gobernabilidad a priori.

La inclinación de los movimientos sociales a intensificarse durante gobiernos de derecha y la de los empresarios a invertir menos bajo mandatos de izquierda, ciertamente tiene motivaciones distintas. Los primeros tienden a juzgar identidades, sus objetos de antagonismo son más permanentes. Los segundos evalúan condiciones y van a invertir donde las encuentren. Pero el hecho es que, desde mediados del primer gobierno de Piñera, Chile se encuentra en un loop en que la derecha no logra estabilidad social y la izquierda fracasa en materia económica. Esto explica en parte que llevemos años con la peor versión de la alternancia en el poder, que es la alternancia conflictiva, patrón que creo veremos repetido en un eventual gobierno de derecha.

Este loop en que el crecimiento económico y el progreso social no se encuentran narrativamente, está en el centro de nuestra disminuida gobernabilidad, generando síntomas institucionales como la disfuncionalidad de nuestra fragmentada Cámara de Diputados. Las reformas que apunten a gestionar el mayor volumen de conflicto en etapas tempranas (como la reforma al sistema político) están bien orientadas. Sin embargo, lo determinante es la disposición de los actores políticos a contribuir a la gobernabilidad, estén o no en La Moneda. La izquierda, en caso de ser oposición, tendrá la oportunidad de exhibir su aprendizaje en el poder, armonizando la justicia social con el crecimiento económico y adoptando una posición constructiva ante la posible reactivación de los movimientos sociales, mejorando sus credenciales de gobernabilidad y contribuyendo a romper el loop.

Por Rafael Sousa, Socio en ICC Crisis, profesor de la Facultad de Comunicación y Letras UDP