Así, viéndolo sólo en imágenes, el recién anunciado Galaxy Z TriFold puede parecer un dispositivo frágil. Siendo tan delgado y con dos bisagras en lugar de una. Si nos fijamos en lo que ya sabemos del Z Fold7, que lleva meses en el mercado y es bastante similar en construcción esas dudas deberían disiparse. Pero por si acaso, Samsung ha publicado un vídeo para dejar claro que estamos ante un smartphone diferente y hecho para durar, muy alejado de lo que sería un prototipo.
Ya sabemos que las primeras versiones de cualquier producto tecnológico suelen ser las que más problemas dan o simplemente, parecen prototipos o tienen detalles in pulir. Todo esto se suele solucionar en versiones posteriores pero lo cierto es que, a primera vista el Galaxy Z TriFold parece ser un producto completamente pulido y terminado. Y no es extraño viendo todo lo que ha aprendido Samsung en plegables premium en estos 7 años en los que los lleva poniendo a la venta: no hay más que ver el grado de refinamiento que luce el Z Fold7.
Pero por si quedaban dudas, Samsung ha publicado un vídeo en el que muestra todo el proceso de pruebas y de fabricación al que somete a su nuevo plegable.
Bajo el título de Ingeniería de precisión en cada plegado, Samsung nos muestra como monta tanto el panel de 10 pulgadas como los paneles externos y la pantalla exterior, en un proceso de presión durante un periodo de tiempo que garantiza la delgadez y una correcta adhesión al chasis además de un correcto montaje de estas piezas. Este proceso viene comprobado mediante medición láser 3D y tomografías computerizadas.
Otro aspecto que Samsung pone a prueba y también se nos muestra es el enfoque de las cámaras. Además, para comprobar el correcto montaje de las bisagras y el funcionamiento y durabilidad de la Flex Screen interior, Samsung somete a un proceso de plegado al terminal. En este test de durabilidad similar al que pasa el Galxy Z Fold7, se llega a plegar y abrir el teléfono hasta 200 mil veces, o lo que es lo mismo, al pasarlo, Samsung nos garantiza que el Galaxy Z TriFold soporta hasta 100 aperturas y cierres al día durante cinco años.
Por último, también se nos muestra como el smartphone de doble pliegue es capaz de soportar hasta 30 minutos bajo el agua, a unos 5 pies de profundidad (un metro y medio) sin dejar de funcionar. Esto certifica su resistencia IP48 que, eso sí, nos asegura que el agua no es un gran problema, aunque debido a las bisagras, es menos resistente al polvo que los modelos convencionales (que suelen tener certificación IP68).
Todas estas pruebas nos dejan claro que el Galaxy Z TriFold no es un prototipo delicado al que habrá que cuidar como si se fuera a romper al mínimo maltrato o accidente. Es un smartphone pensado para durar, y, si bien todavía no conocemos de cuántos años de actualizaciones disfrutará, es más que posible que iguale los 7 del resto de la gama alta de Samsung: otra señal de que será un teléfono para mucho, mucho tiempo.
Imágenes | Samsung
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La noticia
Samsung es como los padres más exigentes: estas son las pruebas a las que somete sin piedad a su nueva criatura
fue publicada originalmente en
Xataka Móvil
por
Manu García (Visnuh)
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